CÓDIGO ATC:
L01XX05.
INDICACIONES TERAPÉUTICAS:
La hidroxicarbamidaestá indicado en el tratamiento de:
Síndromes mieloproliferativos:
1. Esplenomegalia mieloide/mielofibrosa (mielofibrosis idiopática).
2. Trombocitemia esencial.
3. Policitemia vera (poliglobulia primitiva), cuando la flebotomía sola no controla la enfermedad.
4. Leucemia mieloide crónica y síndromes relacionados (en la fase de pretratamiento, cuando sea necesario obtener un rápido descenso de la leucocitosis y como tratamiento paliativo en casos resistentes o que no toleran otras alternativas terapéuticas).
Tratamiento con hidroxicarbamida en combinación con radioterapia:
1. La administración concomitante de hidroxicarbamida con radioterapia está indicada en el tratamiento local del carcinoma de cérvix.
La administración concomitante de hidroxicarbamida con radioterapia está indicada en el tratamiento local del carcinoma epidermoide (escamoso) primario de cabeza y cuello, excluyendo el labio.
FARMACOCINÉTICA Y FARMACODINAMIA:
Absorción:
La hidroxicarbamida se absorbe rápidamente tras su administración oral. Los picos de niveles plasmáticos se alcanzan en 1 – 4 horas tras una dosis oral. Al aumentar las dosis se ha observado un aumento desproporcionado de las concentraciones plasmáticas medias y del AUC. No hay datos sobre el efecto de los alimentos sobre la absorción de hidroxicarbamida.
Distribución:
La hidroxicarbamida se distribuye rápida y ampliamente en el organismo con un volumen de distribución estimado de aproximadamente el agua corporal total. La hidroxicarbamida se concentra en los leucocitos y en los eritrocitos y atraviesa la barrera hematoencefálica.
Metabolismo:
Hasta un 50% de la dosis administrada sufre conversión a través de una ruta metabólica que no está completamente caracterizada. Una ruta es probablemente el metabolismo hepático saturable. Otra ruta menor puede ser la degradación a ácido acetohidroxámico por la ureasa encontrada en las bacterias intestinales.
Excreción:
La excreción de hidroxicarbamida en humanos se realiza probablemente mediante un proceso renal de primer orden. En adultos con neoplasias malignas, la recuperación urinaria media de hidroxicarbamida fue de un 30-55% de la dosis administrada.
PRECAUCIONES Y ADVERTENCIAS:
La anemia grave debe corregirse antes de iniciar la terapia con hidroxicarbamida.
Puede aparecer depresión de la médula ósea, siendo su principal y más frecuente manifestación la leucopenia. Con menor frecuencia se presentan trombocitopenia y anemia. En raras ocasiones se manifiestan sin una leucopenia previa. La probabilidad de depresión de la médula ósea puede aumentar en pacientes que han recibido previamente radioterapia o agentes antineoplásicos citotóxicos; la hidroxicarbamida deberá utilizarse con precaución en pacientes que previamente hayan recibido radioterapia o quimioterapia. La recuperación de la mielosupresión es rápida tras la interrupción de la terapia.
En pacientes con trastornos mieloproliferativos en tratamiento con hidroxicarbamida, han aparecido efectos tóxicos consistentes en úlceras cutáneas incluyendo ulceraciones vasculíticas y gangrena.
Las úlceras se localizan en los pies y principalmente en las piernas y aparecen más frecuentemente en pacientes que tienen una enfermedad arterial o venosa concomitante. Este efecto suele aparecer en pacientes que llevan más de un año de tratamiento continuado con hidroxicarbamida y se calcula que afecta aproximadamente a un 9% de ellos. La aparición de gangrena es mucho menos frecuente.
Debido a las consecuencias clínicas potencialmente graves de las úlceras cutáneas notificadas en pacientes con enfermedad mieloproliferativa, en caso de que se desarrollen deberá interrumpirse la administración de hidroxicarbamida e iniciar como se indique el uso de fármacos citorreductores alternativos.
La administración previa o simultánea de interferón con un agente quimioterápico como hidroxicarbamida puede aumentar potencialmente el riesgo de toxicidad. En particular, los efectos de tipo úlceras cutáneas fueron notificados más frecuentemente en pacientes tratados con hidroxicarbamida y que también estaban recibiendo o habían recibido previamente tratamiento con interferón alfa. En estos casos, las úlceras, vasculíticas o no, y de localización más habitual en dedos, pueden evolucionar hasta la aparición de gangrena. Si los síntomas y signos progresan, será necesario suspender la administración de ambos fármacos e instituir un tratamiento médico adecuado.
Algunas enfermedades como diabetes mellitus, hipertensión arterial, lesiones vasculíticas o enfermedades vasculares previas se pueden considerar como factores de riesgo que pueden potenciar la aparición de úlceras cutáneas en este tipo de pacientes.
Debe considerarse el efecto radio-sensibilizante de la hidroxicarbamida con la radioterapia.
Los pacientes que hayan recibido radioterapia previa, pueden sufrir una exacerbación del eritema postradiación.
Anomalías eritrocitarias: desde el inicio del tratamiento es frecuente observar una eritropoyesis megaloblástica auto-limitante. El cambio morfológico es similar a la anemia perniciosa pero no está relacionado con un déficit de ácido fólico o de vitamina B12. La macrocitosis puede enmascarar el desarrollo incidental de un déficit de ácido fólico, por lo que se recomienda realizar determinaciones de ácido fólico en sangre de manera regular. La hidroxicarbamida puede también retrasar el aclaramiento del hierro plasmático y reducir la tasa de utilización de hierro por los eritrocitos, sin que aparentemente afecte al tiempo de supervivencia de los eritrocitos.
Trastornos respiratorios: se ha comunicado enfermedad pulmonar intersticial, como fibrosis pulmonar, infiltración pulmonar, neumonitis y alveolitis/alveolitis alérgica en pacientes que recibían tratamiento para neoplasias mieloproliferativas, y puede estar asociada a desenlace mortal. Se debe vigilar atentamente, investigar y tratar a aquellos pacientes que presenten pirexia, tos, disnea u otros síntomas respiratorios. La suspensión inmediata de la hidroxicarbamida y el tratamiento con corticoesteroides parece estar asociado a la resolución de los acontecimientos pulmonares.
En pacientes infectados por VIH que fueron tratados con hidroxicarbamida y didanosina, con o sin estavudina, se detectaron casos de pancreatitis mortal y no mortal. En pacientes infectados con VIH, tratados con hidroxicarbamida y medicamentos antirretrovirales, durante el seguimiento postcomercialización de seguridad del medicamento, se han encontrado casos de hepatotoxicidad y fallo hepático que en algunos casos terminó en muerte. Las alteraciones hepáticas mortales se detectaron con más frecuencia en los pacientes tratados con hidroxicarbamida, didanosina y estavudina, por lo que debe evitarse esta combinación de medicamentos. En pacientes infectados por VIH que fueron tratados con hidroxicarbamida en combinación con agentes antirretrovirales, incluyendo didanosina, con o sin estavudina, se detectaron casos de neuropatía periférica, en algunos casos grave.
CONTRAINDICACIONES:
Hipersensibilidad al principio activo o a alguno de los excipientes incluidos en la sección.
La hidroxicarbamida también está contraindicado durante el embarazo y el periodo de lactancia.
La hidroxicarbamida está contraindicada en pacientes con depresión de la médula ósea, como leucopenia (<2,500 leucocitos/mm3), trombocitopenia (<100,000/mm3) o anemia grave.
No deberá administrarse este medicamento a pacientes que hayan tenido historia previa o actualmente presenten úlceras cutáneas y/o úlceras vasculíticas asociadas con el uso de hidroxicarbamida o interferón alfa.
INTERACCIONES:
Debido a que la hidroxicarbamida puede elevar los niveles séricos de ácido úrico, puede ser necesario un ajuste de dosis de los fármacos uricosúricos.
Estudios in vitro con células tratadas con hidroxicarbamida han demostrado un incremento significativo de
la actividad de la citarabina. No se ha establecido si esta interacción puede dar lugar a toxicidad clínica sinérgica o si es necesario modificar la dosificación de citarabina.
La administración concomitante de hidroxicarbamida con otros agentes mielosupresores o radioterapia puede aumentar la probabilidad de depresión de la médula ósea o de otras reacciones adversas.
En pacientes que han recibido o están recibiendo hidroxicarbamida con interferón alfa se puede producir la aparición o agravamiento de lesiones cutáneas como úlceras vasculíticas y gangrena.
Hay un riesgo aumentado de enfermedad sistémica fatal por vacuna con el uso concomitante de vacunas vivas. No se recomiendan las vacunas vivas en pacientes inmunodeprimidos.
RESTRICCIONES DE USO DURANTE EL EMBARAZO Y LA LACTANCIA:
Embarazo
La hidroxicarbamida puede causar daño fetal si se administra a mujeres embarazadas y es un potente agente teratogénico conocido en animales. Se observaron malformaciones en crías de conejo y ratón a las que se había administrado dosis equivalentes a un tercio y al doble de la dosis máxima en humanos, respectivamente.
No existen estudios adecuados y controlados en mujeres embarazadas. Si este fármaco se utiliza durante el embarazo o si la paciente queda embarazada durante el tratamiento, debe ser advertida acerca del daño potencial sobre el feto. Deberá aconsejarse a las mujeres en edad fértil que eviten quedar embarazadas durante la terapia con hidroxicarbamida y que informen a su médico de inmediato si esto ocurriera.
Lactancia
La hidroxicarbamida se excreta en la leche humana. Debido a las potenciales reacciones adversas graves de
la hidroxicarbamida sobre el lactante, se deberá decidir entre interrumpir el tratamiento con interrumpir la lactancia, teniendo en cuenta la importancia que el tratamiento tiene para la madre.
SOBREDOSIFICACIÓN Y TRATAMIENTO:
Se ha notificado toxicidad mucocutánea aguda en pacientes que recibieron hidroxicarbamida a dosis varias veces superiores a la dosis habitual recomendada en humanos. También se han observado ulceraciones, eritema violáceo, edema en las palmas de las manos y en las plantas de los pies, seguido de descamación de las manos y los pies, hiperpigmentación intensa generalizada de la piel y estomatitis aguda grave.
DOSIFICACIÓN Y VÍA DE ADMINISTRACIÓN:
Vía de administración: oral.
La posología de hidroxicarbamida deberá establecerse con relación al peso actual o ideal de los pacientes, considerando siempre el menor de ambos.
La administración concomitante de hidroxicarbamida con otros agentes mielosupresores, puede requerir un ajuste de la dosis.
Síndromes mieloproliferativos:
1. Esplenomegalia mieloide/mielofibrosa (mielofibrosis idiopática)
– 5 a 15 mg/kg/24 horas.
2. Trombocitemia esencial
– Dosis de ataque: 25 a 50 mg/kg/24 horas.
– Dosis de mantenimiento: 10 a 20 mg/kg/24 horas.
3. Policitemia vera (Poliglobulia primitiva)
– Dosis de ataque: 15 a 20 mg/kg/24 horas.
– Dosis de mantenimiento: 10 mg/kg/24 horas.
4. Leucemia mieloide crónica
– Dosis de ataque: 30 a 60 mg/kg/24 horas.
– Dosis de mantenimiento: 15 a 30 mg/kg/24 horas.
Tratamiento con hidroxicarbamida en combinación con radioterapia:
1. Carcinoma de cérvix (terapia concomitante con radioterapia)
– Dosis recomendada: 80 mg/kg en dosis única cada tercer día.
2. Carcinoma de cabeza y cuello (terapia concomitante con radioterapia)
– Dosis recomendada: 80 mg/kg en dosis única cada tercer día.
En la terapia concomitante con radioterapia, la administración de hidroxicarbamida debe iniciarse al menos siete días antes de iniciar la radioterapia, continuar durante la misma, así como indefinidamente después de ella. El paciente debe estar en todo momento bajo adecuada observación para detectar posibles reacciones adversas graves o inesperadas.
La radioterapia debe administrarse a la dosis máxima que se considere apropiada para la situación terapéutica particular de cada paciente; cuando se administra la hidroxicarbamida concomitantemente, normalmente no es necesario un ajuste en la dosis de radiación.
PRESENTACIÓN:
Caja conteniendo 2 blísteres de 10 tabletas.
RECOMENDACIONES SOBRE ALMACENAMIENTO:
Consérvese en lugar fresco y seco a no más de 30°C.
LEYENDA DE PROTECCIÓN:
Mantener este y todos los medicamentos fuera del alcance de los niños.